16 abril 2016 07:15
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La familia Scholten, decidió formar parte de un proyecto que demuestra que se puede vivir de una forma distinta y autosustentable.
En junio del año pasado, una mujer, su esposo, sus dos hijas adolescentes y su perro se mudaron a una vivienda sostenible en el barrio de los muelles de Rotterdam, en los Países Bajos, la diferencia radica en que la vivienda se encuentra ¡dentro de un invernadero! De esta manera, además de vivir cómodamente, pueden cultivar sus propios alimentos.
Este proyecto forma parte de la Universidad de Rotterdam, ya que el concepto de la casa fue desarrollado por estudiantes que decidieron poner a prueba este modelo con una familia real: los Scholten.
El modelo, que denominaron “CHIBB”, tuvo en cuenta para su construcción el uso óptimo de la luz del sol, el tratamiento de residuos, la gestión del agua, la autosuficiencia de alimentos y energía, y todos aquellos aspectos centrales de la arquitectura sostenible.
La casa-invernadero está hecha de madera y vidrio. Las paredes externas poseen, además, una cubierta vegetal donde la familia puede cultivar. También cuentan con un sistema de almacenamiento de agua de lluvia, que utilizan para uso doméstico y para regar los cultivos que los proveen diariamente de alimentos orgánicos. En el diseño también se ha tenido en cuenta la funcionalidad y comodidad de todos los ambientes.
El modelo, que denominaron “CHIBB”, tuvo en cuenta para su construcción el uso óptimo de la luz del sol, el tratamiento de residuos, la gestión del agua, la autosuficiencia de alimentos y energía, y todos aquellos aspectos centrales de la arquitectura sostenible.
La casa-invernadero está hecha de madera y vidrio. Las paredes externas poseen, además, una cubierta vegetal donde la familia puede cultivar. También cuentan con un sistema de almacenamiento de agua de lluvia, que utilizan para uso doméstico y para regar los cultivos que los proveen diariamente de alimentos orgánicos. En el diseño también se ha tenido en cuenta la funcionalidad y comodidad de todos los ambientes.
Fuente:
cdna.labioguia.com
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"Después de esta experiencia, nunca podría volver a una casa convencional”, señala la señora Helly Scholten, la madre de la familia que es parte de este proyecto.
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El proyecto finaliza en el 2018, y pretende demostrar que vivir de manera sustentable es posible y que representa un verdadero ahorro para los gastos habituales de una familia, y que además genera salud y bienestar para todos sus miembros.
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