¿Quién dijo que la caligrafía no es para perros? Este husky decidió demostrarlo tan pronto como sus dueños se fueron al cine. En solo 3 horas, este perro aspirante a artista convirtió todo el apartamento en su lienzo.
Se manchó de tinta las patas y convirtió todo lo que tocaba con ellas en una gigante obra de arte. Incluso dejó su firma en la cama para probar su autoría. Aunque esta versión contemporánea de un arte tan antiguo tuvo que ser limpiado por sus humanos, esperamos que algún día su obra sea reconocida.
Los dueños del perro, quienes mostraron su obra al mundo, explican que el husky utilizó “tinta tradicional para practicar caligrafía china,” la cual es “100% biodegradable y no tóxica para perros o humanos.”
Comentarios 0