En 1939, en vísperas de la 2ª Guerra Mundial, un joven corredor de bolsa británico llamado Nicholas Winton hizo algo realmente increíble. Arriesgó su vida para conseguir salvar a 669 niños (casi todos judíos) de Checoslovaquia durante el Holocausto, asegurándoles un pasaje seguro a Gran Bretala. Y después, como un verdadero héroe, nunca volvió a hablar de ello hasta 50 años después, cuando su esposa encontró un álbum de recortes en el ático de su casa que contenía los nombres, fotos y documentos de los niños que salvó.
Comentarios 0