19 febrero 2017 06:28
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En el Estado de México, en un pueblito que se llama Villa del Carbón, vive una pareja que nos muestra que el amor para toda la vida sí existe. Faustino Jacinto Vázquez y Estefanía Gómez, quienes, además, son una de las parejas más longevas en el país y seguro que también han de ser de las familias más grandes.
Se casaron en 1932 cuando don Jacinto se robó a doña Estefanía; él tenía 18 años y ella 16.
Tuvieron 15 hijos, 4 de ellos murieron. Hoy, el mayor tiene 80 años y el más chico tiene 54. Tienen un yerno y 9 nueras, 68 nietos, 114 bisnietos y 21 tataranietos.
Actualmente don Faustino va a cumplir 103 años, y doña Estefanía cumplirá 101. Siguen cuidándose, y aunque tienen problemas de salud leves, como problemas respiratorios o problemas con la vista y el oído, en general gozan de buena salud.
¿Su rutina?
Ella prepara la comida, cuida las plantas de su casa, mientras don Faustino juega dominó y cuida la tierra de su hogar.
¿Su rutina?
Ella prepara la comida, cuida las plantas de su casa, mientras don Faustino juega dominó y cuida la tierra de su hogar.
En 85 años NUNCA han dormido separados.
Al preguntarles el secreto a un matrimonio duradero y feliz responden: el respeto. Él nunca le levantó la mano, ni un pellizco, asegura doña Estefanía.
“Cuando ella creía que yo hacía algo mal, me corregía. Y también cuando yo veía algo que no iba, se lo decía, agrega Faustino.
Un matrimonio ejemplar que nos muestra que el vivir felices para siempre sí puede existir, pero es a base de amor, respeto y mucho esfuerzo por parte de las dos personas. Ellos nacieron en una época en donde si algo se rompía, se arreglaba.
Al preguntarles el secreto a un matrimonio duradero y feliz responden: el respeto. Él nunca le levantó la mano, ni un pellizco, asegura doña Estefanía.
“Cuando ella creía que yo hacía algo mal, me corregía. Y también cuando yo veía algo que no iba, se lo decía, agrega Faustino.
Un matrimonio ejemplar que nos muestra que el vivir felices para siempre sí puede existir, pero es a base de amor, respeto y mucho esfuerzo por parte de las dos personas. Ellos nacieron en una época en donde si algo se rompía, se arreglaba.
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