A veces la vida está llena de esas casualidades que van acompañadas de una historia increíble, esta vez, se trata de uno de esos dramas parecido a las novelas de dos hermanos que fueron separados al nacer, pero que concluyó esta vez con un final feliz. El destino jugó a favor de estos dos hermanos gatunos, quienes se rencontraron gracias a una familia con mucho amor para dar. Los dos hermanos llegaron junto a otros cuatro pequeños al centro de refugio Petaluma Animal Services, ubicado en California, Estado Unidos. Luego de varios meses, solo quedaron Butter y Ozzy.
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