La pequeña Sophia Benner, a sus 2 años, aprendió a ir al baño, fue por ello que como recompensa, su madre Brandi la llevó a comprar un regalo. Pero no fue ninguna sorpresa que Sophia eligiera una muñeca doctora. Lo que sí fue una sorpresa fue la reacción de la cajera al ver la muñeca. ¿Por qué? Porque la muñeca era negra, algo en lo que Brandi y su hija ni siquiera habían pensado hasta que la cajera se lo mencionó a Sophia.
“Cariño, ¿estás segura de que esta es la muñeca que quieres?”, preguntó la cajera, y cuando la niña dijo que sí, la cajera continuó diciendo “Pero si no se parece a ti. Tenemos más muñecas que se parecen mucho más a ti.”, pero antes de que su madre callara a la vendedora, Sophia le cerró la boca con la mejor respuesta.
La anécdota se publicó en Instagram, aunque también ha sido compartida en Facebook, donde ha recibido más de 450.000 likes y ha sido compartida más de 180.000 veces. Puede que Sophia solo sea una niña pequeña, pero es más inteligente que muchos adultos hechos y derechos…
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