Los gatos no dejan de sorprender por el cariño que inspiran y por su inteligencia, por ello, Kawasaki Hina, un chico japonés de 27 años, no esperaba que pasara nada en particular, hace dos años, mientras iba camino a casa. Pero, de pronto, se le acercó una pequeña gatita.
La minina estaba sola y cuando vio a Hina, pareció decidir en ese momento que el sería su nuevo dueño, así que no se apartó de su lado y lo persiguió con determinación.
El joven Hina no vio otra opción: puso a la gatita con cuidado dentro de una caja de cartón y decidió llevarla a casa con él.
Al llegar a hogar de Hina, inmediatamente la gatita se sintió como en casa, desperezándose en el sofá de su nuevo dueño.
Pero antes de que Hina pudiera acostumbrarse a la nueva situación, la gatita ya se había quedado dormida profundamente.
Vell es el nombre que Hina le puso a la gatita, lleva 2 años viviendo con él y pocas veces se aparta de su lado.
Y Hina no puede estar más contento. Ahora Vell es parte de su familia y no puede imaginar la vida sin su peluda compañía.
Y los sentimientos son claramente mutuos: parece que este par estarán juntos para siempre.
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