Lori no tiene ningún recuerdo de los acontecimientos de ese día. No sabe lo que sucedió después, sólo conoce lo que le dijeron. Rápidamente llegaron los servicios de emergencias y ella y sus hijos fueron trasladados a hospitales distintos.
Chris y Lori sólo buscaban conseguir un poco de justicia en contra de la empresa del conductor y el camión que se llevó la vida de sus hijos. Pero sólo seis meses más tarde recibieron la noticia de un milagro increíble…
En mayo de 2007, la familia Coble experimentó una tragedia devastadora. Mientras la mamá, Lori Coble, se dirigía a su casa con sus tres hijos, de 5 años de edad, Kyle, 4 años de edad, Emma, y Katie de 2 años de edad, un camión que transportaba 20 toneladas de productos electrónicos se estrelló contra la parte posterior de su monovolumen. El camión estaba conduciendo a una velocidad de 122km/h.
Lori no tiene ningún recuerdo del incidente; su marido Chris tuvo que darle la terrible noticia que sus queridos hijos estaban muertos… Se le vino el mundo encima
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